BORDAS FOTOGRAFÍA: PRUEBA | Audi RS3 Sportback

En Bordas Fotografía os he traído muchas reviews de coches compactos, ya que pienso que durante muchos años no les hemos dado la importancia que debían tener. Hoy voy a hablar del hothatch por excelencia, el más poderoso, rápido y eficaz del mercado. Sus ingredientes son 400cv, tracción integral, cambio automático de doble embrague y casis MQB. Me estoy refiriendo al Audi RS3 Sportback.

Parece que la marca de los 4 anillos echó toda la carne al asador para que les saliera semejante coche, que se corona como el mejor de la gama hothatch. No sé si sabéis que el Audi A3 es uno de los coches más comprados por gente joven, pues el RS3 es ese sueño húmedo de cualquier chaval, que desea tener 400cv debajo del capó, unas cifras poco comunes en este tipo de vehículo. No sólo se trata de un compacto ideal para el día a día, si no que también para hacer viajes largos o disfrutar de un buen tramo de curvas en puerto de montaña. Hoy voy a probarlo en diferentes escenarios y situaciones para encontrar sus claves.

El RS3 es un modelo que desde 2011 ha ido recibiendo modificaciones pero siempre ha tenido ese perfil musculoso sin llamar la atención, algo que a Audi se les da muy bien hacer. Su diseño nunca ha presentado rasgos de coche radical para que se lo pueda comprar todo tipo de público y pueda ser usado diariamente, pasando por desapercibido en todo momento. Esta versión que hoy os muestro también se caracteriza por este tipo de exterior y presenta algunos detalles que cabe destacar. En la parte frontal se puede apreciar una gran parrilla, con dos entradas de aire a cada lado, y un splitter donde se puede leer la inscripción Quattro. Lleva los faros Matrix LED, que producen una luz parecida a la diurna para que la vista no se canse, y además incorpora funciones especiales para circular con tranquilidad, tanto en ciudad, carretera, autopista, con mal tiempo, etc.

En el lateral se puede observar unas taloneras, las llantas de 19 pulgadas específicas del RS6 y los pasos de rueda, ensanchados 20mm delante y 14mm detrás. En la parte trasera se contempla un gran y elegante difusor, en el que están integradas dos salidas de escape de forma ovalada, que cuentan con dos mariposas para controlar el flujo de los gases y proporcionan un sonido menos o más intenso, dependiendo de la carga del motor y aceleración. Finalmente vemos un distintivo spoiler trasero en el techo, que resulta grande pero sin llegar a ser macarra.

El interior también es otro de los puntos fuertes de este modelo, debido a la aplicación de materiales de primera calidad y tecnología para ayudar a la conducción. En el salpicadero se observa la ausencia de muchos botones al haber integrado una pantalla de 7 pulgadas en el centro. Entre el piloto y copiloto encontramos un panel central donde se ubica el cambio de marchas S-Tronic, el botón de arranque y un tipo de joystick para controlar las opciones multimedia. El volante está revestido en alcántara e incorpora unas levas que pueden resultar pequeñas y, en muchas situaciones, poco eficientes. Como característica está el Audi Virtual Cockpit, el cuadro de mandos digital de 12.3 pulgadas dónde podemos ver toda la información que queramos, desde los marcadores de revoluciones o kilómetros hasta el mapa para guiarnos.

La luneta delantera es muy grande y el conductor tiene muy buena visibilidad. Si pagas un poco más también puedes gozar de un techo panorámico, que en verano se agradece muchísimo. Aunque se le describa como un 5 plazas, realmente caben 4 personas y los asientos que lleva, hechos en cuero, son muy cómodos. A diferencia del Mercedes A45 AMG, por ejemplo, el acceso a las plazas traseras es fácil gracias al ángulo de apertura de las puertas y a la caída poco significativa del techo. Aunque disponga de varios espacios para guardar la cartera, llaves, móvil, etc., su maletero es más pequeño que el de sus rivales, con un cubicaje de 335 litros. Aún y así, suficiente para llevar 4 maletas e ir de viaje sin problema alguno. En definitiva, es confortable y práctico.

Antes de pasar a la prueba de conducción hay que conocer algunos datos importantes. Lleva un motor 2.5 litros de cinco cilindros turbo que desarrolla 400cv y 480nm de par máximo. Se acompaña de una caja de cambios S-Tronic automática de doble embrague con 7 marchas, que se puede manejar vía levas o palanca convencional. Así, alcanza los 250km/h con velocidad limitada o 280km/h sin limitar, y es capaz de acelerar de 0 a 100km/h en solo 4.1 segundos. Quien diría que no estamos hablando de un deportivo.

Ahora sí, es hora de coger el volante y conducir esta bestia alemana. Para eso nos vamos a una carretera de montaña, cerca de Barcelona, para ponerlo a prueba y comprobar cuánto de bueno es este modelo. Tenemos cuatro tipos de conducción: auto, confort, individual y dynamic, el más adecuado para este momento. Sólo apretar el botón Start-Up, para poner en marcha el coche, me doy cuenta en qué tipo de coche estoy montado. Cojo el volante con fuerza, hundo el pie derecho y de repente el RS3 sale catapultado, pegándome al asiento como en un superdeportivo. La respuesta del motor es instantánea y la sensación que transmite no corresponde a la de un hothatch. A todo esto hay que sumarle el sonido, que es ronco pero no cuenta con los pops & bangs de la versión anterior. Cuando se alarga una marcha o se baja emite un ruido espectacular que enamora y asusta a la vez.

La primera impresión al llegar al tramo de curvas es de un coche más ágil y ligero de lo que pensaba, y es que de hecho pesa 1.510 kg gracias, entre otras cosas, al nuevo bloque motor de aluminio que ahorra carga en la parte delantera. Así, redondea las curvas más rápido y con mayor facilidad, y resulta ser fácil de conducir, argumento que usan los "anti-audi" para cargar contra el coche. La dirección también es titular, porque ofrece precisión y rigor para que podamos ir a un ritmo bastante rápido sin problemas. Si que es verdad que los frenos tardan en calentarse pero muerden como una fiera, aunque no lo te lo tomes con mucha confianza porque si frenas a último momento puedes irte recto sin poder hacer nada, como si estuvieras encima de una placa de hielo.

Esto sucede cuando tienes un tracción total tan impotente y no puedes jugar con él, a diferencia de un BMW M2 por ejemplo. El agarre de Quattro es una barbaridad y parece que vayas circulando sobre unas vías de tren, y hasta en muchas ocasiones me parece demasiado y puedo preferir, en este ámbito, el VW Golf R (ver). La suspensión también es rígida y cuenta con un reglaje adaptativo, con lo que mantiene en cada instante la horizontalidad, el equilibro y prescinde de turbulencias. Después de unos kilómetros a todo gas me doy cuenta que el consumo tampoco es excesivo, rondando los 10L/100km y los 8L/100km a ritmo normal.

En definitiva, gracias a la mejora en agilidad y dirección, y a la tracción Quattro puedes hacer un tramo de curvas con confianza, pero sin quererle buscar las cosquillas. Muestra seguridad y alcanza ritmos sorprendentes, además se ser práctico y cómodo. Seguramente en conducción sea más divertido un tracción trasera ohasta me atrevería a decir un delantera, pero con estos has de ir con cuidado.

El Audi RS3 Sportback se encuentra en varios colores, diferentes llantas y bastante equipados, aunque cualquier "pijería" que quieras hará incrementar el precio final. En España se puede comprar a partir de los 66.380€, caro para el segmento que es y teniendo en cuenta los precios de sus rivales, pero ya sabemos que es una de las consecuencias de la calidad.